Soriano gasta su última bala a la espera de salvar al club

Vicente Soriano ya no tiene más salidas. Con su último movimiento ha gastado la bala que le quedaba. No hay más en la recámara. Primero, hay que confiar en que se confirme el pago por la transacción de las acciones de Juan Soler y compañía. Ahora mismo hay unos avales, con lo que la operación aún no está oficialmente sellada. Segundo, que el Consejo Superior de Deportes (CSD) dé el visto bueno a la sociedad Inversiones Dalport como poseedora del 50,3% de los títulos.
Y tercero, después de todos esos trámites, que este grupo realmente aporte las garantías legales para traer los 500 millones de inyección, porque su intención es anular la ampliación de capital al no verla necesaria.
Se trata de un puzzle en el que, si se culminan las dos primeras fases, todo quedaría supeditado a la tercera. Y es donde reside la clave. Porque si se anula la ampliación de capital y por alguna de aquellas el dinero no llega, se caería irremediablemente en suspensión de pagos.
Soriano aglutina el 10% de títulos propios, más el 37% de Soler y el 4% restante de Silla que pasarán a manos de Dalport el día en que los pagarés venzan. Entonces se podrá corroborar que esta empresa es a todas luces el accionista mayoritario. Si Soriano no cumple todas las promesas que anunció como representante de ese 50,3 % de los títulos, y por tanto ejerciendo como máximo accionista y presidente de la entidad, llevará al club al desastre. O lo que es lo mismo, al concurso de acreedores.
A pesar de que Dalport entre con 46 millones en la primera fase de la ampliación de capital, va a ser temporal porque cuando acceda al poder, a través de la Junta Extraordinaria, la revocará y provocará la devolución del capital a todos los accionistas que hayan intervenido en la misma.
En ese caso, si el colchón de los 500 millones de euros no se hace realidad y no se inyecta en el club (Soriano y Víctor Bravo, públicamente y en la intimidad, respectivamente, han defendido que los traerán) el Valencia no tendrá suficientes recursos económicos para sobrevivir y los documentos que ya están impresos en el club, respecto a la suspensión de pagos, saldrán del cajón y se presentarán en el juzgado.
Por otro lado, la página web de la empresa se bloqueó y no permitía el acceso a la información, todo lo contrario a lo ocurrido en días pasados.

Fuente: Diario Marca.